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jueves, 20 de abril de 2023

Exposición de ilustraciones inéditas para 'El Principito'

Ilustración de Elisa de la Torre Llorente.
Antoine de Saint-Exupéry estaba convencido de que, igual que existen pozos de aldea para dar vida a nuestros cuerpos, hay fuentes invisibles que nutren nuestro espíritu. Que “lo esencial es invisible a los ojos” no es sólo una frase bonita de un zorro del desierto, sino la clave para entender todo el libro, y toda vida humana. Cuando el principito le ordena al piloto “¡Dibújame un cordero!”, no se conforma con uno visible, sino sólo con el invisible, el que descansa dentro de la caja. Ese dibujo, no otro, conecta con la vocación primera del piloto, que no es sólo la de ser pintor, sino la de ser pintor de realidades invisibles, como el cordero dentro de la caja. Como el elefante comido por una boa. Como el sentido de urgencia que expresa la imagen de los baobabs haciendo estallar el planeta del Principito. Como…

La imaginación de lo invisible es una exposición recoge dos series de ilustraciones, de diez imágenes cada una. Ambas son obra de Elisa de la Torre Llorente. La primera serie, figurativa, fue concebida para ilustrar el texto original de Saint-Exupéry. La segunda, abstracta, fue ejecutada para acompañar al texto Yo siempre vi un sombrero (Álvaro Abellán-García Barrio, Editorial UFV, 2022).

Obra figurativa

Estas ilustraciones pretenden facilitar el acceso a lo invisible de El Principito. Son, en primer lugar, un homenaje al espíritu sencillo y natural de las ilustraciones originales. En segundo lugar, son una adaptación a la sensibilidad de nuestro tiempo y sus nuevas formas visuales. Están inspiradas en la expresividad del anime y en autores como Benjamin Lacombe y Nicoletta Ceccoli, reconocibles por dibujar rostros redondos y sonrojados llenos de luminosidad, con pequeñas sombras atenuadas. El color otorga a los dibujos un aspecto fresco, infantil y divertido a la vez que soñador. Su suavidad reafirma las ilustraciones pero no quita protagonismo a la línea. Buscando ser fieles a la obra del autor, muchas de las ilustraciones apenas modifican las originales, ofreciendo sólo un acabado diferente. Otras son nuevas, inspiradas en fragmentos de la obra que no fueron ilustrados por Saint-Exupery, aunque presentan situaciones o escenarios relevantes para comprender el trasfondo de la historia del principito

lunes, 21 de marzo de 2022

Yo siempre vi un sombrero | Encuentros con el Principito

Muchos de los que leyeron El Principito de niños no tienen un gran recuerdo de la obra. Porque no es un libro para niños. Al leerlo de adultos, somos muchos los que pensamos: “Nunca supe ver el elefante dentro de la boa; yo siempre vi un sombrero”. Así me decía mi querido José Manuel de León cuando le hablé del libro que Elisa de la Torre y yo estábamos perfilando y que hoy te presento.

En este pequeño libro nos proponemos no sólo enseñar a ver el elefante, sino mucho de lo invisible que contiene el relato del piloto, mucho más de lo que los tópicos populares e incluso la crítica formal han subrayado. El Principito no nos propone un retorno a una infancia acrítica, ni relata una ensoñación, sino que promueve nuestra “imaginación de lo invisible”, nos enfrenta a los misterios que fundamentan nuestra vida, haciéndonos ver con el corazón lo que es invisible a los ojos.

Cada capítulo es una meditación de una frase o un párrafo de cada episodio de El Principito. La estructura de nuestro libro respeta la temporalidad lineal -a diferencia de la obra original- lo que permite recorrer mejor la lógica del drama vital de cada uno de los amigos -el piloto y el principito- que se inicia con el despertar de la vocación, la renuncia a cumplirla, la caída en el desierto -el exilio de una vida sin vocación-, el encuentro con el amigo que nos hace renacer a nuestra vocación y el afrontamiento esperanzado de la soledad, el mal y la muerte.

En la primera parte acompañamos en su viaje al principito: del asteroide B-612 hasta su encuentro con el zorro. En la segunda parte, acompañamos al piloto que quiso ser pintor, desde que descubrió y renunció a su vocación, a la edad de seis años, hasta que su vocación le grita de nuevo en el desierto: Dibújame un cordero. En la tercera parte meditamos sobre el encuentro entre el principito y el piloto. Nuestra contemplación de estas dos vidas concluye frente al más bello y más triste paisaje del mundo

sábado, 10 de octubre de 2020

‘El Principito’ y la imaginación de lo invisible

Ilustración de Antoine de Saint-Exupéry para El Principito

Muchos estudiosos defienden que la Fantasía como género moderno surge como un cuestionamiento de la categoría de «realidad». Parten de esta constatación: el sentido común de una época considera «reales» una serie de cosas e «irreales», «falsas» o «imposibles» otra serie de cosas. Según ellos, el género fantástico juega a introducir en ese «sentido común» lo que se considera irreal, falso o imposible y lo hace aparecer como verdadero, eficaz, poderoso. De esta forma, en esas obras, el considerado orden natural de las cosas se ve amenazado o alterado… y precisamente en lo que provoca en la obra –y en el lector– esa alteración, residiría lo específico de lo fantástico.

lunes, 22 de octubre de 2018

Conferencia: El Principito y la imaginación de lo invisible

Fragmento de una de las ilustraciones originales de Saint-Exupery para El Principito.
Aprendí a leer El Principito de manos de un buen maestro, quien me capacitó para descubrir en esa pequeña obrita nuevas perspectivas que iluminan mi propia vida. El verdadero maestro no sólo nos comparte su visión; también nos enseña a mirar por nosotros mismos.

viernes, 29 de junio de 2018

“El principito”: construir una vida en torno a la amistad

Luis Mora, fundador de la Academia de Curiosos, me invitó a clausurar la temporada en torno al tema de la amistad en El Principito. El contexto general del curso consistía en Aprender a mirar, así que, más que impartir yo una conferencia, todos los curiosos hicimos juntos el ejercicio de mirar la obra maestra de Antoine de Saint-Exupery, interrogándole sobre el tema.

La dedicatoria del libro contiene ya algunas pistas:
A LEON WERTH
Pido perdón a los niños por haber dedicado este libro a una persona mayor. Tengo una seria excusa: esta persona mayor es el mejor amigo que tengo en el mundo. Tengo otra excusa: esta persona mayor es capaz de entenderlo todo, hasta los libros para niños. Tengo una tercera excusa: esta persona mayor vive en Francia, donde pasa hambre y frío. Verdaderamente necesita consuelo. Si todas esas excusas no bastasen, bien puedo dedicar este libro al niño que una vez fue esta persona mayor. Todos los mayores han sido primero niños. (Pero pocos lo recuerdan). Corrijo, pues, mi dedicatoria:
A LEON WERTH CUANDO ERA NIÑO
¿A qué escritor sensato se le ocurre dejar por escrito sus correcciones y vacilaciones en torno a la misma dedicatoria del libro? Pero... ¡Saint-Exupery no era mal escritor! Así que esta dedicatoria es un ejercicio retórico, es ya literatura, forma parte de la obra. ¿Y qué nos revelan estas palabras? Algo encontramos en las tres excusas:

jueves, 24 de diciembre de 2015

Conversaciones sobre ‘El Principito’



El Instituto John Henry Newman (IJHN) quiso sentarnos cara a cara a @Chema Alejos y a un servidor para conversar sobre El Principito. Sin guion, sin indicaciones… dos buenos amigos que comparten pasión por una misma obra. Supongo que gustará a los amantes del libro; a nosotros se nos pasó la hora en un suspiro y me temo que hicimos trabajar extra a los editores del Instituto.

viernes, 25 de abril de 2014

‘El principito’ encuadernado: aprender a ver con el corazón

Encuadernación de Javier Abellán y María Barrio. El texto está integrado en la silueta del principito. 
Las figuras y el libro tienen un imán que permite situarlos en cualquier parte del planeta.

«Sólo hay un lujo verdadero: el de las relaciones humanas. Al trabajar sólo por los bienes materiales, construimos nuestra propia prisión». Estas palabras de Antoine de Saint-Exupéry en Tierra de los hombres guiaron la presentación de El principito encuadernado, una exposición de encuadernación de arte organizada por Llar del Llibre y acogida en la sala Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Federico Soto, en el corazón de Alicante. Fue, cómo no, el pasado 23 de abril, día del libro, en el año en que conmemoramos la desaparición del autor francés bajo el manto del Mediterráneo.

jueves, 1 de agosto de 2013

Cómo transformar la melancolía en una fuerza espiritual y creativa

Edward Hopper, Excursión a la filosofía, 1959.
La melancolía, como en su día dijimos de la rebeldía, es una de esas pasiones ambivalentes que la mentalidad moderna no ha sabido comprender bien, tratando de extirparla del alma como si fuera algo con lo que es mejor no contar. Pero ambas cuentan, y mucho, como fuerzas que pueden orientar nuestra vida no sólo hacia la frustración, sino también a la plenitud.

Quien padece melancolía –la expresión es a un tiempo justa y provocadora- sufre una tensión constante entre la realidad que vive y un anhelo de excelencia. Romano Guardini escribió en sus Apuntes para una autobiografía que la melancolía es el lastre que da a la embarcación su calado. Sin ella, es fácil instalarnos en la superficie de la existencia; es difícil vivir con hondura.