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viernes, 16 de mayo de 2014

¿Qué son las narrativas transmedia?

Fotograma extraído del vídeo que cierra esta nota.

La voluntad de expresión del ser humano, su espíritu creativo y el potencial del mundo digital hacen muy difícil seguir el ritmo de los nuevos conceptos, estrategias, formatos y lenguajes de la comunicación social. Una de las nuevas estrategias de comunicación que ya ha tenido y va a tener aún más recorrido es la de las narrativas transmedia. ¿Qué demonios quiere decir esa expresión? La agencia de publicidad Draft Fcb ha elaborado un vídeo de cuatro minutos en el que lo explica muy bien.

Comparto contigo mi respuesta provisional a estas tres preguntas: ¿Qué es una narrativa transmedia? ¿Cómo se desarrolla? ¿Es un experimento pasajero o aporta algo valioso y distintivo? Huelga decir que la perspectiva desde la que respondo a estas preguntas no es la de un anunciante, una marca o un publicitario. Respondo sólo como aficionado y estudioso de los relatos en el ámbito de la comunicación social. Ti te interesa ahondar teóricamente en este tema, te recomiendo el artículo académico de Mª Isabel Rodríguez Fidalgo y Sara Molpeceres Arnáiz "The inside experience y la construcción de la narrativa transmedia. Un análisis comunicativo y teórico-literario", en Cuadernos de información y comunicación, 2014, vol. 19, 315-330. Si tu interés te lleva más lejos, entonces te recomiendo el libro Narrativas Transmedia de Carlos A. Scolari (@cscolari).

¿Qué es una narrativa transmedia?

  • Es un relato coherente y bien definido;
  • que se distribuye de distinta forma en los diversos medios disponibles: Twitter, Facebook, YouTube, televisión, radio, prensa…
  • que contiene diversos niveles de profundidad, para atender a los diversos niveles de implicación de cada público;
  • que invita a la participación activa del público tanto en el devenir de la historia como en la difusión de la misma;
  • y en el que cada parte de la historia, contada en el medio específico en el que aparece, enriquece el conjunto y alimenta la conversación sobre ella entre el público.

¿Cómo se desarrolla?

  • Los elementos esenciales de la historia se separan y se distribuyen sistemáticamente en diversos canales relacionados entre sí.
  • Cada parte de la historia pretende crear una experiencia inmersiva de entretenimiento, implicando a los públicos para que busquen más información, acudan a otras fuentes y redes o pregunten a otros usuarios.
  • La motivación del público está en el interés que tenga la propia historia, en lograr saber más que los otros o, sencillamente, en tener información suficiente para poder entrar en la conversación de los demás.
  • Los narradores, que escuchan las conversaciones de los públicos, pueden participar o incluso tomar nota para prolongar la historia o definir nuevas historias a partir de la original.

¿Es un experimento pasajero o aporta algo valioso y distintivo?


A mi juicio, las narrativas transmedia tienen algunos elementos interesantes por los que merece la pena conocerlas y tal vez practicarlas:

  • La estructura del relato responde al modo en el que muchos jóvenes acceden a la información que les interesa. En ese sentido, puede descubrir formas de comunicación social más acertadas para que algunas personas o instituciones conecten y se relacionen mejor con este tipo de públicos.
  • Al fraccionar la historia en diversos medios podemos aprovechar las ventajas específicas de cada canal, de tal manera que la articulación entre forma y fondo permite explorar al máximo el contenido de cada historia y las ventajas de cada medio.
  • Al contar la historia de diversas formas, atendiendo a diversos matices, en diversos momentos y por distintos canales, lo que antes era propio sólo de grandes narradores ahora parece una exigencia inexcusable: la historia debe ofrecer diversos niveles de profundidad y diversos puntos de vista.
  • Los diversos niveles de profundidad responden también a los diversos niveles de interés y participación por parte de los públicos. Eso permite diversos grados de interactividad y de experiencia inmersiva que además de traducirse en mayor o menor disfrute puede ser también más o menos formativa o enriquecedora.
  • El nivel de participación del público así como el contenido compartido por ellos es una riquísima fuente de información para valorar la narración y tomar decisiones estratégicas sobre su desarrollo futuro o sobre la forma en la que el narrador puede relacionarse con su público (feedback).
  • El mayor riesgo que le veo a esta forma de contar historias –y no es menor, ni poco importante– es que favorece la fragmentación y la dispersión entre los públicos no comprometidos –cabe esperar que entre los públicos comprometidos favorezca el espíritu de búsqueda y de integración–.

Dados los afanes apocalípticos de amantes y enemigos de las novedades tecnológicas, me veo en la obligación de escribir lo que sigue: las narrativas tradicionales no quedarán obsoletas. Lejos de perder valor ahora queda subrayado, por contraste con las transmedia, su carácter distintivo y su valor específico. Personalmente, ahora resuena más que nunca en mi interior la afirmación aristotélica sobre el valor de la tragedia por relatar, en un tiempo y espacio perfectamente delimitados, «una acción humana completa y acabada».

La comunicación es un arte, un saber práctico y, por lo tanto, no hay formas o técnicas en sí mismas mejores o peores que otras. Unas u otras son mejores según los fines que persigan, los sujetos implicados, las circunstancias concretas que definan cada situación comunicativa, etc. La narrativa transmedia es una forma más de comunicación que, según quienes se topen con ella, dará mejores o peores frutos.

Aquí tienes el vídeo del que te hablé:

2 comentarios:

  1. A mi me repatea un poco el hecho de que se considere el concepto "transmedia" como algo nuevo, cuando se lleva haciendo desde hace muchísimo tiempo ... Un ejemplo; las novelas de Star Wars, cómics y demás cuentos en distintos formatos (cassettes, vinilos..) ... y anterior a eso todos los cómics Marvel / DC con referencias unos a otros ; o las fotonovelas de las series, o las novelas contadas en artículos de periódicos, que se esparcían a viñetas, y a la propia novela una vez finalizada.

    Entonces no existía internet, ni twitter, ni demás... pero aun así se hacía un "transmedia" con los medios disponibles.

    Ahora, con la moda del querer ser transmedia, la obra base donde se cuenta la historia principal que queremos contar puede quedar incompleta por sí sola, no entendiéndose si no se tienen el resto de referencias... Algo así padecieron las continuaciones de Matrix, las cuales necesitabas ver los cortos animados y el videojuego de turno para poder entender mejor (que tampoco había mucho que entender) la historia.

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  2. Chapeau, Davinci. El riesgo de convertir lo transmedia en "estrategia" es justo el que dices: que la historia central deje de ser historia. Que el relato deje de ser lo importante para perdernos en cosas menores. Que lo esencial se pierda. Algo de eso he querido dejar entrever en la entrada, pero tú lo has explicado son sencillez y claridad.

    Por otro lado, yo sería más benévolo con respecto a lo que cuentas en tu primer párrafo. Que se practicara antes de internet (y del cine, y del cómic... y seguramente casi desde las cavernas) no quiere decir que se teorizara sobre ello. Suele ocurrir que la teorización y la sistematización vienen después de mucha práctica y, aun así, es útil, porque nos permite sistematizar y reflexionar críticamente sobre lo que hacemos. Y yo creo que la sistematización sí es relativamente reciente...

    Un abrazo!

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